50 y tantos años, madre de Daniel, Rafael y Gabriel. Es muy amorosa, una gran madre, amiga, compañera, acogedora, cariñosa, afectuosa, pero también puede ser muy severa cuando debe regañar. Es dueña del quiosco “Workaholic“, en la orilla de la playa. Le gusta mucho cocinar y platicar con sus hijos cuando está en casa.

Tiene experiencias culinarias interesantísimas. Teresa sufre mucho con todos los problemas por los que sus hijos pasan, siendo directamente afectada por ellos. Ella es una persona muy asustadiza, fácilmente impresionable. Cuando ve a su hijo ir preso el día de su boda, se desespera e intenta de todas las maneras posibles resolver el problema. Pero es impotente delante de los hechos y va a sufrir la amargura de ver que lo que iba a ser una linda fiesta se transforma en un evento trágico, con su hijo inocente detrás de las rejas, como si fuera un marginal.