Primer hijo de Lea con Jacob, nieto de Isaac. Rubén quiere decir “el Señor atendió mi aflicción”, porque Lea era la menos favorecida de Jacob. Rubén y sus cinco hermanos (Simeón, Leví, Judá, Isacar y Zebulón) constituyeron la mitad de las tribus originales de Israel. Desde niño, Rubén se resiente que su madre sea preterida por su tía Raquel. Es él quien trae las mandrágoras, planta usada para hacer una mujer más fértil, que Lea usa para negociar con Raquel. Rubén pierde el derecho de primogenitura al acostarse con Bilá, la concubina de su padre, sierva de Raquel. Él lo hace por puro deseo carnal, sin gran implicación para con ella. Al final de la vida, Jacob describe al hijo como su fuerza, principio de su vigor, el más excelente en alteza y el más excelente en poder e impetuoso como el agua, pero al acostarse con su concubina se contaminó y perdió sus derechos.